Un estudio realizado por la compañía Ericsson reveló que los retrasos al cargar páginas web y videos los niveles de estrés aumentan.
Por ejemplo, un retraso de 6 segundos al cargar un video de YouTube en un smartphone eleva un 34 por ciento el estrés, situación que se puede comparar a la ansiedad que produce un examen de matemáticas o ver una película de terror, e incluso supera a la tensión de encontrarse al borde de un precipicio o en una larga espera fila de la caja del supermercado.
Asimismo, se encontró que un retraso al momento de descargar una página de internet aumenta la frecuencia cardíaca en una media de un 38 por ciento.
Para el estudio se analizaron las reacciones de 30 voluntarios de edades entre 18 y 52 años en Copenhague, Dinamarca. Todos ellos fueron seleccionados al azar de un panel existente de usuarios. Los voluntarios fueron equipados con medidores de pulso, gafas de seguimiento de movimiento ocular, y se les puso en la cabeza unos electrodos para registrar su actividad cerebral.
A cada participante se le entregó un smartphone con sistema Android y se les pidió realizar 18 tareas como navegar en internet a través de los artículos de noticias en las páginas web y videos de YouTube que se crearon con una serie de retardos predeterminados. Debían completar las tareas en 20 minutos.
Para medir el nivel de estrés se usó una escala del cero al 1. Una puntuación de hasta 0.7 se considera normal al momento de esperar que se cargue una página. Las puntuaciones superiores al 0.8 pertenecen a niveles muy estresantes. Los retardos cuando cargar un vídeo o un sitio web son superiores a este nivel.
Los voluntarios también quedaron con una mala percepción de la operadora de telefonía móvil, tras sufrir retrasos en la carga de videos y de los sitios web. Primero, se manifestó una mala imagen sobre la compañía que provee los servicios de banda ancha móvil y surgieron deseos de cambiarse a la competencia. Después, si había más demora los usuarios rechazan el valor de la marca.