México, 31 Ene.- Al inaugurar la primera exposición del año en el Museo de Arte Moderno (MAM), “Fascinación: Modotti-Weston”, la curadora y directora de ese recinto, Sylvia Navarrete explicó que “es muy útil volver a poner a esos dos personajes frente al público mexicano porque desde 1966 Weston no había tenido una muestra aquí”.
Respecto a Modotti, la funcionaria recordó que de ella se tuvo una exposición individual en el Museo Nacional de Arte (Munal) en 1983 y desde entonces no se había presentado.
“Ahora, vuelven a la escena de los museos y además, juntos. Lo que presentamos ahora es lo que hicieron juntos en México en materia artística más allá de su relación amorosa”, sostuvo.
Luego, entre un grupo de invitados, amigos y público en general, Navarrete y su comitiva recorrieron la muestra de vida y obra compartida de los fotógrafos Tina Modotti (1896-1942) y Edward Weston (1886-1958), que permanecerá abierta al público del 31 de enero al 3 de mayo. En el acto se anunció que el catálogo correspondiente ya está a la venta.
La muestra está integrada por 67 fotografías, 35 de Edward Weston, 29 de Tina Modotti y tres de autor no identificado, que revelan el amor que los artistas se profesaron, mismo que se extendió al arte de la fotografía y a México, país que los acogió.
En su trabajo se aprecia la energía con la cual se compenetraron sus ejercicios plásticos en torno a la anatomía.
Queda de manifiesto el efecto catalizador que ejercieron en ellos el país y la circunstancia posrevolucionaria sobre su concepción del retrato y su muy particular innovación de la naturaleza muerta, la cual consiste en subrayar cualidades escultóricas, geométricas y abstractas de los objetos fuera de su contexto habitual, comentó Navarrete.
Como se sabe, el talento de la italiana Tina Modotti floreció en México con una carrera artística que duró apenas siete años y legó 400 negativos, pero que cosechó una fama de icono sexual y agente secreto comunista.
Mientras que la estancia del estadunidense Edward Weston en México sumó tres años y 750 fotografías; su trayectoria se prolongó por cuatro décadas.
La práctica artística de Modotti nació en México y propició que Weston incursionara en el desnudo, la naturaleza muerta y el paisaje. Ello suscitó vasos comunicantes entre sus respectivas producciones.
Su relación comenzó en Los Ángeles en 1921 y se consolidó en 1923, al concretarse en México su proyecto de vida bajo el mismo techo.
Al llegar a tierras mexicanas, Modotti y Weston se relacionaron con personalidades del gremio cultural e intelectual del México de la reconstrucción nacionalista, como Diego Rivera, Manuel Álvarez Bravo, José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros, Xavier Guerrero y Frida Kahlo.
Cautivaron a Modotti el aprendizaje con Weston, la efervescencia posrevolucionaria y los conflictos sociales. Por su parte, Weston centró su producción fotográfica en la reducción de elementos a su mínimo esquema y máxima expresividad, en descubrir la anatomía femenina y en crear paralelos entre el cuerpo femenino desnudo y los objetos cotidianos.
El idilio se fue entibiando en 1925, hasta la despedida el año siguiente. Ella se quedó en el país hasta ser expulsada en 1930, sacrificando todo por la causa estalinista, y él regresó a su país de origen de manera definitiva, se explicó esta tarde en la exposición con la que el MAM inició sus actividades formales correspondientes al 2015.