La tecnología está cambiando radicalmente el turismo, desde la elección de alojamiento con ayuda de unas gafas de realidad virtual o la aplicación de Airbnb hasta la atención en hostelería a cargo de los primeros robots humanoides.
Reflejando esta tendencia, la ITB de Berlín, la mayor feria turística del mundo, dedica en su actual edición, que arrancó el miércoles y concluye el domingo, más de tres pabellones a las novedades tecnológicas del sector.
Los expertos abogan por que la industria se suba cuanto antes al tren de la digitalización y que se aproveche su potencial, alertando asimismo de la llegada de nuevos actores al sector, algunos de ellos con un marcado perfil tecnológico, como el polémico servicio bajo demanda de vehículos con chófer Uber.
“Tenemos que abrazar la tecnología y emplearla”, apostó el secretario general de la Organización Mundial de Turismo, Taleb Rifai, en su habitual encuentro con los medios en el marco de la ITB.
Rifai consideró que la tecnología es uno de los tres grandes retos que tiene ante sí la industria turística internacional, junto con el desafío de la seguridad -ante la amenaza terrorista- y la sostenibilidad económica del sector.
En este sentido, el ministro de Turismo de España, José Manuel Soria, subrayó, tras visitar a los expositores de su país en la feria, que, cada vez más, el viajero es un “turista digital”, “tanto en el diseño de las vacaciones como en la valoración de la experiencia”.
“Tenemos que adaptarnos a los cambios que han venido y a los que están por venir”, agregó a este respecto el titular de Turismo español.
Estos cambios están empezando a reflejarse en la industria, como señaló Rifai al apuntar que “los viajes individuales”, frente a los organizados, “están incrementándose”.