Desde que a finales de los años 90 el teléfono móvil comenzó a popularizarse entre la ciudadanía, este dispositivo ha revolucionado por completo la manera de entender las comunicaciones entre individuos y ha propiciado el acceso a un universo de servicios y contenidos inimaginables hace tan sólo dos décadas.
Sin embargo, como recoge hoy nuestro suplemento MERCADOS, en los próximos años, la tecnología móvil está llamada a provocar una transformación aún mayor de la sociedad y la economía del siglo XXI. La llegada del 5G va a propiciar una nueva revolución industrial que impactará en todos los sectores.
Se calcula que en el año 2020, tres cuartas partes de la población mundial estará ya conectada con tecnología móvil. Se trata de una cifra escalofriante, pues 5.600 millones de personas contarán con un dispositivo móvil para hablar o navegar por la red. Pero no contento con eso, el sector de la telefonía móvil se dispone a emprender un nuevo proceso para conectar también a todas las máquinas del planeta a través de la aún incipiente tecnología 5G. Una conexión que obligará a las industrias y empresas a redefinir sus estrategias para aprovechar las infinitas oportunidades que este salto tecnológico va a traer de la mano.
Ésta es una de las principales conclusiones que se han podido extraer del Mobile World Congress que ha celebrado su décima edición esta semana enBarcelona. La que ya es bautizada por muchos como revolución del Internet de las Cosas va a impulsar el progreso de nuestras sociedades y nuestra economía. Pero también va a venir acompañada de una serie de riesgos y retos que la sociedad actual aún no está preparada para controlar.