Un estudio reveló que las capas de hielo de la Antártida liberan cloro radioactivo a causa de las pruebas de armas nucleares que se realizaron en el Océano Pacífico entre las décadas de 1950 y 1960.
El hallazgo, publicado por Journal of Geophysical Research, explica que los ensayos realizados por Estados Unidos en la zona produjeron alteraciones en la concentración de isótopos, informa RT.
Dichos isótopos llegaron a la estratósfera y viajaron por todo el mundo, incluida la Antártida. En este lugar se depositaron en el hielo. Muchos de ellos han regresado a los niveles normales previos a las pruebas. Sin embargo, el cloro-36 todavía permanece.
La investigación asegura que la región afectada es la base rusa Vostok, que sigue desprendiendo dicha sustancia radiactiva hacia la atmósfera. En este lugar, los niveles son diez veces más elevado de los previsto.
No obstante, los especialistas determinaron que la cantidad de radiactividad esa baja como para perjudicar el medio ambiente.
Continuando con sus investigaciones, los científicos planean perforar el núcleo de hielo de 1,5 millones de años en la Antártida. Buscan comprender cómo es posible que el cloro-36 se haya quedado impregnado por tanto tiempo en Vostok, además de la manera en que este viaja a la atmósfera.
Los resultados podrán ayudar a fechar mejor el hielo antiguo y a estudiar cómo ha evolucionado el clima en la Tierra.