Para avanzar de manera firme y sostenida en el combate a la pobreza, es necesario fomentar más asociaciones público-privadas y ampliar la colaboración con las organizaciones de la sociedad civil, sostuvo esta mañana el secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade Kuribreña, al inaugurar las instalaciones del Banco de Alimentos en los municipios de Zapotlanejo y Tepatitlán, en el estado de Jalisco.

Bancos de Alimentos de México es una asociación civil mexicana sin fines de lucro que desde 1995 se dedica al rescate de alimentos para combatir el hambre y mejorar la nutrición de la población vulnerable en Mexico.

Se trata de la única red de bancos de alimentos que existe en nuestro país y la segunda más grande del mundo. Cuenta actualmente con más de 60 puntos de distribución en el país. Su labor ha permitido el rescate, en 2014, de 117 millones de kilos de alimento aptos para el consumo humano.

En junio de 2014, la Secretaría de Desarrollo Social y Bancos de Alimentos de México suscribieron un convenio a través del cual se han brindado apoyos para la construcción de 10 bancos y un centro de acopio, ubicados en 9 estados de la República.

Asimismo, dicho acuerdo ha permitido el uso de 80 millones de pesos del Programa de Apoyo al Empleo, para el otorgamiento de apoyos económicos a jornaleros.

Meade Kuribreña señaló que en la actualidad en nuestro país se desperdicia el 37 por ciento de los alimentos que se producen en distintos puntos de la cadena. “Algo sencillamente insostenible en un país con tantas necesidades, con millones de mexicanos que padecen hambre y con 28 millones que enfrentan carencias en el acceso a la alimentación”, enfatizó.

Recordó que el objetivo número cuatro de la Cruzada contra el Hambre es minimizar las pérdidas de alimentos inmediatamente después de la cosecha y durante su almacenamiento, transporte, distribución y comercialización.

Sostuvo que las mermas a lo largo de la cadena de abasto suman casi 80 mil millones de pesos anuales, lo que representa el 25 por ciento del valor de la producción de cereales, frutas, verduras, tubérculos y legumbres secas de México.

Dichas pérdidas se traducen en incrementos a los precios que afectan directamente al consumidor final de la cadena.

Es decir, recordó, que las pérdidas generan un encarecimiento que afecta principalmente a las familias más pobres del país.

El titular de la Sedesol recorrió las instalaciones de los bancos de alimentos en Zapotlanejo y Tepatitlán, en compañía del gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, con quien se reunió para conversar acerca de los retos y oportunidades que se enfrentan en esta entidad en materia de combate a la pobreza.

Información e imagen de: sedesol.gob