El mejor jugador mexicano en las dos últimas décadas, Cuauhtémoc Blanco, se despidió de las canchas con el título de la Copa MX Clausura 2015, luego que Puebla derrotó 4-2 a Guadalajara, en la final que se disputó en el estadio Universitario BUAP.
El cuadro tapatío ofreció quizá su peor actuación en este certamen, sobre todo en la defensa que sufrió con los balones aéreos y cuando se dio cuenta ya tenía dos en contra.
Al minuto siete cayó la primera anotación, misma que se originó en el cobro de una falta muy lejana por izquierda a segundo poste, donde Michael Orozco recentró a la altura del manchón penal, donde Facundo Erpen se levantó para conectar otro testarazo al fondo de las redes.
La Franja mantuvo el control y antes del minuto 30 ya ganaba por dos, gracias a otro balón parado, ahora por el sector de la derecha, al área, donde Luis Gabriel Rey conectó un frentazo letal al ángulo superior izquierdo, al minuto 26.
Tanto era el descontrol de Chivas, que se salvó de una tercera anotación cerca del descanso en un mano a mano de Alonso Tamay, que el arquero rojiblanco Antonio Rodríguez ganó para evitar la caída de su marco.
Las fallas que tuvo Puebla para liquidar el partido le costaron muy caro, ya que para el complemento, al Rebaño Sagrado le bastaron solo dos jugadas para lograr el empate.
Primero,al minuto 54, Aldo de Nigris, por izquierda, metió un centro que no llevaba nada, pero Erpen tapó al portero Fabián Villaseñor, quien no pudo atajar el balón que terminó en el fondo de las redes. Un minuto después, el propio Aldo se encontró con un rebote y únicamente tuvo que empujarlo al fondo de las redes.
Al 59, Kristian Álvarez metió una mano dentro del área para que se decretara la pena máxima que Gustavo Alustiza concretó con un potente disparo, imposible para Rodríguez, con lo que el local recuperó la ventaja 3-2.
Ocho minutos después, el “Chavo” Alustiza, en una gran jugada individual, se quitó a Miguel Ponce para cruzar su disparo y poner el cuarto gol.
Cuauhtémoc Blanco ingresó a la cancha al minuto 70 para disputar sus últimos momentos como futbolista.
Chivas todavía tuvo la posibilidad de reaccionar, pero De Nigris, quien le devolvió la vida a su equipo, falló desde el manchón penal al enviar su remate por fuera.
Las luces se apagaron en el tiempo de compensación y tardaron casi diez minutos en volver a prender, para darle que el partido terminara con una despedida digna a un ídolo del futbol mexicano, que se va como campeón.
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