Los políticos son una especie de seres que antes que nada buscan la adulación.
Pocos son los que verdaderamente buscan un cargo para trabajar y no para ‘hacer como que trabajan’.
Escribo lo anterior porque a la gobernadora de Tlaxcala Lorena Cuéllar fue captada asistiendo a un arranque de acciones de vivienda en un municipio de siu estado llamado Teolocholco, sin embargo, en su gira de trabajo se le pudo observar con un andador de rodilla (muy fifí por cierto) y una bota ortopédica.
Hasta aquí usted amable lector, se preguntará ¿qué tiene de malo?.
En los hechos nada, malo.
Pero en opinión de quien esto escribe, es normal que los políticos sufran accidentes, fracturas, se enfermen, se les baje la pila o les de el bajón, o sea, son seres humanos, comen y tienen sus necesidades iguales a las nuestras, sin embargo, aún sigo sin entender esa necedad de aparentar que trabajan y que ‘pese a las condiciones de salud’, el gobernante o diputado o senador o presidente municipal se presentan a cumplir su trabajo.
Es válido que se ausenten por salud o motivos personales o re programen sus agendas, insisto, son seres humanos.
Lo que no se observa bien para la opinión pública es parecer que ‘trabajan’ pese a que iba con una fractura o lo que sea que le haya pasado a la gobernadora. No pasaba nada si no iba la mandataria o mandaba a un Secretario.
No pasaba nada si re programaban.
No pasaba nada si se daba un descanso para recuperarse y observarse fuerte después de su accidente.
Todo lo contrario, ya le hicieron memes, las reacciones en redes sociales principalmente Facebook son ‘me divierte’ y los comentarios giran en torno a que si se atendió en el sistema de salud tipo Dinamarca.
¿Nadie le dijo a la gobernadora que mejor se recuperara y el evento se hiciera unos días después?
Digo, también se vale decir no.
Pero en fin, por eso nunca entenderé a los políticos y mucho menos su necedad.
La nota que buscaron no era la entrega de acciones de vivienda, entrega de apoyos o algo que beneficiara a la sociedad, sino que la gobernadora a pesar de su salud acudió al trabajo.
No pues gracias.
