Eduardo Rivera Pérez hoy tiene una oportunidad de oro para que como dicen sus estrategas de comunicación “corregir el rumbo de Puebla”.
Lo hará acompañado de los perfiles que él considera mejores para poder regresarle a la ciudad de Puebla la grandeza que perdió con la llegada de la cuarta transformación.
Los detractores de Lalo Rivera quien hace unos meses juraron que no volvería a la escena pública, hoy serán testigos del resurgimiento del político – funcionario que tomará las riendas de la ciudad para corregirla en todos los fracasos que la colocó Claudia Rivera Vivanco de la mano del Movimiento de Regeneración Nacional que fue un total fracaso.
Rivera Pérez entra otra vez a la función pública en un escenario distinto al primero que jugó en la administración 2011-2014. Su relación con el impresentable gober rencorosos Miguel Barbosa es sana, pues al final, lo que importa en momentos de crisis como los que vive la ciudad y lo que menos quieren los poblanos son pleitos entre el políticos cuando la prioridad es sacar a la ciudad de Puebla del bache en el que la metieron los gobiernos “moralmente superiores” de morena.
El político Eduardo Rivera sabe que tiene solo una oportunidad para demostrar de qué está hecho, para demostrar que su capacidad lo puede colocar en la antesala del proyecto 2024 del cual ya es ganador de un boleto en la final.
Prácticamente los errores no tienen cabida en la administración entrante, pues tanto los heridos morenistas así como los detractores azules de Eduardo Rivera aprovecharán cada centímetro de error que pueda cometer Lalo o su equipo.
De ahí la tolerancia 0 a errores o desfiguros de los funcionarios que por ahora deben tener como prioridad sacar adelante a la capital poblana y devolverle la grandeza que fue perdiendo con la primera mujer de izquierda que gobernó la ciudad.
Es así como Lalo Rivera puede hacer un “Make Puebla great again”, sus funcionarios serán sus generales de esta batalla contra el desastre provocado por la pandemia, la inseguridad, el ambulantaje, la corrupción morenista, el abandono de los servicios públicos, la mala planeación y hasta los bolardos que provocaron más accidentes que ayuda para los poblanos.
Ojalá le vaya bien a Lalo Rivera, por el bien de la ciudad... make Puebla great again.
