“Hágase la voluntad de Dios… en los bueyes de mi compadre.”
(Dicho popular)
AHORROS VEMOS, DESTINO NO SABEMOS: Para distraernos de una opaca campaña presidencial, las cortinas de humo de la semana se centraron en la violación soberana a la embajada de México en Ecuador, totalmente contraria a la Convención de Viena y a la territorialidad de la embajada, aunque haya sido para detener a un personaje ligado con el crimen organizado, y, más cerquita, en la absurda propuesta para crear un fondo de pensiones PÚBLICO, quitando (decomisando) dinero privado. Nos centraremos en este tema de indudable Poder Económico.
Y sí, la propuesta que hoy se discutirá y seguramente se aprobará por el grupo legislativo mayoritario propone constituir un “fondo de pensiones” (sin reglamento ni reglas de operación) que se constituirá, entre otras fuentes (también discutibles) con el ahorro no reclamado por ciudadanos de más de 70 años (si son trabajadores del sector público serían 75 años, una discriminación constitucional más) depositado en las Afores.
Así, nada más, se “expropia” el ahorro (incluyendo el voluntario) de miles de mexicanos, sin analizar las causas de que no hayan reclamado sus ahorros, que no por eso dejan de ser suyos, por múltiples razones, entre otras, por enfermedad, porque siguen trabajando, porque sus herederos, en el caso de ahorradores fallecidos, ignoran la ubicación de dichas cuentas, etc. ¿Se acuerdan de Hugo Chávez vociferando “¡exprópiese!” a todo lo que olía a iniciativa privada y sumiendo a Venezuela en un nivel histórico de pobreza al pasar a manos de su gobierno? En fin, son ahorros privados, personales que no tienen por qué pasar de un plumazo a un fondo que no los generó.
Por cierto, el presidente declaró que otras fuentes para ese “fondo de pensiones”, serían las “utilidades” del Tren Maya y del Aeropuerto Felipe Ángeles. Utilidades que, con las cifras actuales no se generarán jamás. Pero, si las hubiere habrá que recordar que el 14 de junio de 2020, el ingeniero militar Gustavo Vallejo, a cargo de la construcción del AIFA, dijo en entrevista televisiva que las ganancias de esta importante obra “serán destinadas a la Secretaría de la Defensa Nacional” y esto sería, sin reglas ni lineamientos presupuestales, “POR MANDATO PRESIDENCIAL”. Algo semejante se señaló cuando se asignó a los militares la construcción del Tren Maya.
Bueno, habrá que decirle al Ingeniero Vallejo que también, “por mandato presidencial”, esas supuestas y utópicas utilidades serán para un bizarro “fondo de pensiones” sin pies, ni cabeza.
Desde el punto de vista económico y recordando que el propio presidente señaló que en la construcción de esas obras no habría pérdidas porque se construirían con recursos públicos (¿generados por quién?) se podría pensar en una constitución de ese fondo con recursos también públicos y no expropiando ahorros privados al segmento de la población en edad de mayores necesidades y menores ingresos o, peor, con el único recurso de sus ahorros, Sería bueno que, antes de la absurda imposición, las AFORES publicaran la lista de los beneficiarios de fondos no reclamados para determinar LEGALMENTE lo que los beneficiarios desean hacer con SU dinero.
FALTA DE RECURSOS PÚBLICOS, INEFICIENCIA ECONÓMICA: Esto nos lleva a pensar que quizá no existen fondos públicos para cumplir tan electorera oferta. El aumento del 50% de la deuda externa (de 10 a 15 billones de pesos) nos haría pensar tal cosa y supondríamos que para taparle el ojo al macho alguien tuvo la (in)feliz ocurrencia de tomar dinero ajeno.
Los gobiernos obtienen recursos para financiar sus gastos principalmente a través de impuestos. Estos impuestos pueden ser directos, como el impuesto sobre la renta, o indirectos, como el impuesto al valor agregado (IVA). Mediante la recaudación de impuestos, el gobierno obtiene ingresos que pueden destinar a financiar programas y servicios públicos, así como pagar deudas y cubrir otros gastos.
Además de los impuestos, los gobiernos pueden obtener recursos mediante la emisión de DEUDA PÚBLICA. Emiten bonos del gobierno que son adquiridos por inversionistas, quienes a cambio reciben intereses sobre el capital prestado. Esta deuda pública es una forma de financiamiento a corto o largo plazo que los gobiernos utilizan para cubrir déficits presupuestarios o financiar proyectos de infraestructura, que debieran de ser productivos para pagar la deuda y los intereses que causó. Para proyectos como el Tren Maya, el parámetro es de una amortización de 10 años, antes de generar excedentes (en el sector público no existen “utilidades”). Pero para ello se requieren 8 mil pasajeros diarios (no 30 como ahora) pagando boletos de mil dólares por viaje (no 1,700 pesos, como ahora). Deuda impagable pues, otro FOBAPROA a costillas de los causantes.
Otra fuente importante de ingresos para los gobiernos son las tarifas y tasas. Estas pueden incluir el pago por servicios específicos como el agua, la electricidad o el transporte público, así como multas y licencias. Estas tarifas y tasas proporcionan ingresos adicionales que pueden destinarse a cubrir los costos asociados con la prestación de servicios públicos o la regulación de actividades económicas.
Los gobiernos también pueden obtener recursos a través de ingresos por la venta de activos públicos, como terrenos, empresas estatales o recursos naturales. La privatización de empresas estatales, por ejemplo, puede generar ingresos significativos que pueden destinarse a financiar programas y proyectos gubernamentales.
Finalmente, los gobiernos pueden recurrir a financiamiento externo, como préstamos de organismos internacionales o de otros gobiernos. Estos préstamos pueden utilizarse para cubrir necesidades financieras a corto plazo o para financiar proyectos de desarrollo a largo plazo. Sin embargo, el endeudamiento externo también puede aumentar la dependencia y el riesgo financiero del gobierno.
Cuando un gobierno hace inversiones improductivas y aumenta el gasto en programas sociales mientras disminuye el número de contribuyentes, puede enfrentar desafíos financieros graves como el aumento del déficit presupuestario, una mayor deuda pública y eventualmente a problemas económicos como la inflación o la devaluación de la moneda. Además, puede generar desequilibrios en la economía y dificultades para financiar programas sociales a largo plazo. Cuba, Venezuela, Nicaragua, Argentina, Grecia, Haití, Hungría y Zambia son ejemplos de incapacidad política para manejar las finanzas públicas.
Cuando esto ocurre, se suelen buscar culpables internos y externos, recurrir a tácticas de miedo y represión, a manipular la información y a fragmentar y dividir a la sociedad, aprovechando y minimizando la falta de cultura política y económica de la mayoría de la gente. Los pobres seguirán siendo pobres y aumentarán con la depauperización de la clase media y, por lo visto, con los nuevos pobres que perderán sus ahorros de toda la vida. Fenómeno económico digno de estudios sociológicos y sicológicos.
DE FONDO: Timothy Snyder es acucioso investigador que ha analizado las similitudes y diferencias entre regímenes autoritarios y totalitarios, como el nazismo y los regímenes contemporáneos de América Latina, y ha escrito extensamente sobre la Europa del siglo XX, incluyendo el Holocausto y los regímenes totalitarios.
En sus obras "Tiranos: Historia de los regímenes totalitarios" y “Camino hacia la no libertad”, Snyder explora las características comunes de estos regímenes a lo largo de la historia, incluyendo el nazismo, el comunismo soviético y otros regímenes autoritarios del siglo XX. Examina cómo estos regímenes utilizan la propaganda, la represión política, la mentira y la violencia para controlar a la sociedad y mantenerse en el poder, pese a su pésimo manejo de la economía. Sería socialmente benéfico consultar a este autor y dejar a un lado el Libro Vaquero.
DE FORMA: En 1958, antes de la Revolución Cubana de 1959, Cuba tenía un sistema educativo relativamente avanzado para América Latina, con una tasa de alfabetización en aumento y una infraestructura escolar en desarrollo. Después de la Revolución Cubana de 1959, el gobierno cubano implementó cambios significativos en el sistema educativo que incluyeron elementos de adoctrinamiento político. Durante las décadas siguientes, se introdujeron reformas educativas destinadas a inculcar valores revolucionarios y fomentar la lealtad al gobierno y al Partido Comunista de Cuba (PCC) (nueva religión en escena) mediante el control, sin opción, de la educación y la enseñanza.
DEFORME: ¿Ya fue usted al súper en abril? Aunque el INEGI reporta una inflación anualizada del orden del 4.42%, con su fórmula de ponderaciones, las amas de casa encontraron incrementos en pan, productos agropecuarios y cárnicos de hasta 30% en marzo con relación a febrero. ¿Alguien tiene otros datos?
